¿Por qué odiamos a algunos animales?, se pregunta el naturalista César Javier Palacios, que destaca cómo a veces una cuestión estética lleva a confundirnos sobre su importancia en la naturaleza.

Se trata de un error especialmente grave en el caso de los insectos. Despiertan pocas simpatías, pero se están revelando como esenciales en la vida de los seres humanos.

El blog Somos Triodos destaca cómo los insectos “trabajan” en favor de nuestra salud o incluso llenando nuestra despensa con buena parte de los alimentos que nos resultan esenciales.

Pequeños vigilantes de campos y parques…

Esta mariquita cuida de la salud de los árboles de Zaragoza. El proyecto Parque Zero -iniciativa de Zinnae por una gestión más sostenible de los espacios verdes- ha introducido estos animales para controlar la plaga del pulgón, del que la mariquita es un enemigo natural. Así, se evita utilizar químicos y también sus efectos sobre el entorno y las personas.

El control biológico, denominación de esta técnica alternativa a los plaguicidas, no solo es eficaz, sino que también evita “matar mosquitos a cañonazos”, en términos coloquiales. Los pequeños aliados del hombre tienen una dieta selectiva, sin afectar a especies beneficiosas como las abejas, que sí han visto sus poblaciones diezmadas por los plaguicidas.

ResBioAgro
Centros de I+D como el de ResBioAgro en Sevilla investigan por una agricultura más sostenible

“Queremos proporcionar soluciones alternativas a la agricultura salvaguardando el medioambiente”, explican desde los laboratorios de ResBioAgro, en la Universidad de Sevilla, donde investigan y asesoran a agricultores. Al igual que lo hacen desde Entomotech, en el Parque Científico de Almería, iniciativa que, como la anterior, ha contado con crédito de Triodos Bank.

Sus investigaciones son especialmente valiosas para la agricultura ecológica, que prescinde de plaguicidas. Dentro de su búsqueda de un equilibrio con el ecosistema, en esta modalidad agrícola incluso se plantan especies vegetales para atraer a insectos beneficiosos.

… e insectos que nos llenan la despensa

Es difícil de imaginarlo al abrir la nevera, pero buena parte de los alimentos que vemos dependen de la existencia de múltiples especies de insectos. Las abejas y otros polinizadores hacen posible que los cultivos den el fruto deseado, hasta el punto que su actual disminución ha alertado a los científicos.

Colmenar de la Fundación
Colmenar de la Fundación Triodos en Holanda

Por ello, numerosas iniciativas están promoviendo la instalación de colmenas incluso en espacios urbanos, como es el caso del colmenar de la Fundación Triodos en Holanda.

El efecto beneficioso de la presencia de polinizadores lleva también a los agricultores a introducir colmenas.

“Se usan en muchos cultivos, como el tomate, el pimiento o los almendros y se ha observado que influye notablemente en el tamaño y el peso de los frutos”, explican desde Green Biosystems. Esta empresa biotecnológica murciana, que también trabaja con Triodos Bank, ofrece un servicio especializado de introducción de colmenas de abejorros en el campo para dar más garantías de éxito al agricultor de forma natural.

Como las demás iniciativas, sus conocimientos permiten avanzar por una convivencia más armoniosa entre la actividad humana y el entorno. Y, en particular, a conocer mejor el valor de unos animales, los insectos, que representan el 90 % de las formas de vida del planeta.

Quizás se merezcan algo de nuestra simpatía…