“Las técnicas que necesitamos para alcanzar los objetivos del acuerdo contra el cambio climático de París ya existen. Ahora debemos aplicarlas a gran escala”, afirma Ad van Wijk, profesor en la Universidad de Tecnología de Delft (Países Bajos). Sería especialmente importante el uso de hidrógeno como alternativa al gas natural, según el académico y profesional de las energías renovables.

“Soy hijo de un granjero y, literalmente, crecí con las fuerzas de la naturaleza”, dice Ad van Wijk. “Cuando era niño siempre estaba fuera, expuesto al sol, a la lluvia o al viento. Creo que a una edad temprana sentí intuitivamente la energía que hay en la naturaleza”.

Van Wijk estudió Física en Utrecht, en la década de 1970. “Era el momento del informe Límites al crecimiento, del Club de Roma. Eso despertó mi atención con respecto a la capacidad de carga de la Tierra. Y, con motivo de la crisis del petróleo durante ese periodo, también me di cuenta de la vulnerabilidad de nuestro sistema de energía, que dependía por completo del petróleo del exterior. La respuesta a las preguntas ecológicas y geopolíticas fue obvia para mí: generar autónomamente energía sostenible”.

Un pionero de las renovables

Van Wijk fue cofundador en 1984 de Ecofys, una consultoría pionera en el ámbito de la energía sostenible. Más tarde se convirtió en presidente de la junta directiva de Econcern, compañía que realizó proyectos relevantes de renovables en Europa, incluyendo desarrollos de energía solar en España.

El énfasis en los próximos 10 o 15 años estará en la construcción de más parques eólicos en el mar y en la transición al hidrógeno
Ad van Wijk

Econcern se declaró en quiebra en 2009. Durante la crisis financiera, la empresa experimentó cada vez más dificultades para financiar los proyectos principales y, finalmente, no pudo cumplir sus obligaciones. “Entonces, de repente, me encontré sentado en el sofá de mi casa. Pero tenía claro que quería seguir trabajando en aras de la transición energética”. Actualmente lo hace como profesor de Sistemas de energía para el futuro “con un gran grupo de inspiradores emprendedores e investigadores que desarrollan soluciones innovadoras para la futura demanda de energía”.

“Energía sostenible para todos todavía es mi misión personal”, afirma. “Estoy convencido de que es posible: una transición completa a fuentes sostenibles. Pero eso no se puede conseguir sin esfuerzo. Por lo tanto, antes de que eso suceda, habrán pasado décadas. Porque construir suficiente capacidad de generación sostenible requiere mucho tiempo. No obstante, eso justifica que hay que empezar lo antes posible y a gran escala”.

Solo hidrógeno sostenible

El papel del hidrógeno según Triodos Bank

Itske Lulof es directora de Energía y Clima en Triodos Investment Management, la gestora de fondos de inversión responsables de Triodos Bank.  Lulof ve un gran futuro para el hidrógeno.

“Especialmente en la industria y para el transporte más pesado, como sustitución de los trenes y barcos que funcionan con diésel. De hecho, la red de gas natural se puede usar para el transporte de hidrógeno, pero solo si el hidrógeno se genera de una manera sostenible, con viento en el mar. En el entorno construido, veo menos potencial para el hidrógeno porque vamos a hacer una transición a lo eléctrico, vamos a cocinar y calentar las casas a través de paneles solares y una bomba de calor. Y esto se combinará con mucho más transporte eléctrico, a través de automóviles y bicicletas. Esto nos permite dar un audaz paso para alejarnos de los combustibles fósiles y acercarnos a la generación de energía totalmente sostenible”.

 

¿Por qué es necesario un enfoque a gran escala?    

Seamos realistas: no solo debemos crear proyectos localesy a pequeña escala para, por ejemplo, generar electricidad verde. Ese tipo de proyectos, como la construcción de parques solares locales, son fundamentales, pero en general generan muy poco, teniendo en cuenta lo que se necesita. En mi opinión, durante los próximos diez a quince años el énfasis debería estar en la construcción de más parques eólicos en el mar y en la transición al hidrógeno”.

“Respecto ala energía eólica en el mar, es con mucho la forma más eficiente de generar energía sostenible, ahora y en los próximos años. Un aerogenerador en el mar genera aproximadamente el doble de energía que uno en tierra. Hasta hace poco, la construcción de parques eólicos en el mar tenía que ser subvencionada, pero eso ya no es necesario”. A principios de este año, por ejemplo, se anunció que la empresa sueca Vattenfall estaba construyendo un parque eólico offshore por primera vez sin subvención. Este parque debe estar terminado en 2022 y proporcionará electricidad a 1 millón de hogares.

Un aerogenerador en el mar genera aproximadamente el doble de energía que uno en tierra
Ad van Wijk

Energía eólica para millones de personas

Actualmente, Holanda cuenta con tres parques eólicos en el mar, y se están construyendo dos más. Entre 2023 y 2030, se agregarán otros 7.000 megavatios de potencia de generación en el mar, explica Van Wijk. “En total, en el año 2030, habrá 20.500 megavatios de parques eólicos offshore. Será suficiente para abastecer a más de 11 millones de hogares con electricidad. Además, dado que los Países Bajos tiene menos hogares (para sus 17 millones de habitantes), parte de la energía generada también se podrá utilizar para la industria, por ejemplo.

Recientemente, Triodos Bank, pionero en la financiación de energía eólica desde 1986, ha sumado a su actividad la inversión en parques en el mar, con la instalación alemana Nordsee One como el primer proyecto en el que participa. La meta del banco es maximizar el impacto positivo en términos de reducción de emisiones de CO2, causantes del cambio climático, de la forma más eficiente posible.

Aunque la capacidad total planificada de la energía eólica en el mar parece considerable, los parques existentes y planificados no son más que el principio, según Van Wijk. “No existen alternativas factibles y asequibles a gran escala respecto a la energía eólica en el mar, porque todas las demás opciones son mucho más costosas. Los aerogeneradores de viento en tierra tampoco son una alternativa viable. Naturalmente, también debe haber más, pero el espacio es limitado, especialmente en países pequeños como Holanda”.

Críticas a los parques eólicos marinos

Para Van Wijk, la preocupación sobre el impacto en los ecosistemas de estas instalaciones “es razonable y es fundamental integrar bien los parques eólicos en el mar, también en lo que respecta a la ecología”.

El experto opina que “no se pueden poner parques eólicos en cualquier lugar, hay que tener en cuenta los valores naturales al determinar las ubicaciones. Para no afectar innecesariamente al ecosistema, también es importante designar ciertas áreas de descanso en el mar. Pero hay que entender que, incluso dentro de un parque eólico, la flora y la fauna a menudo incluso se pueden recuperar”.

El papel del hidrógeno

“El hidrógeno es una alternativa importante al gas natural. La electricidad es necesaria para producir hidrógeno. Con aerogeneradores adicionales en el mar, el hidrógeno puede fabricarse con la electricidad de esosaerogeneradores”, afirma Van Wijk.

La gran ventaja del hidrógeno es que la infraestructura para el transporte ya existe. Porque en el mar ya hay muchas tuberías que ahora se usan para el transporte de gas natural desde los campos de gas en el mar. Estas tuberías se pueden usar para el transporte seguro de hidrógeno sin tener que hacer muchos ajustes. Esto mismo es aplicable para la red de gas natural en tierra. Y en lo que respecta a los hogares: las calderas existentes y las cocinas de gas también funcionan con hidrógeno. Será necesario realizar ajustes relativamente pequeños, especialmente en el quemador”.

La gran ventaja del hidrógeno es que la infraestructura para el transporte ya existe
Ad van Wijk

El hidrógeno también puede ser una fuente de energía viable para la industria, así como para el tráfico y el transporte, opina Van Wijk. “Puedes volver a convertir el hidrógeno en electricidad. Eso significa que puedes utilizar vehículos eléctricos, siempre que los equipes con una célula de combustible que convierta el hidrógeno. Actualmente, en Alemania se está instalando una red de 400 estaciones de servicio especiales para que turismos puedan repostar hidrógeno”.

Una respuesta al problema del almacenamiento 

Un gran inconveniente de las fuentes de energía renovables, como las turbinas eólicas y los paneles solares, es que su generación de energía es en ocasiones impredecible. La producción es máxima en días despejados con mucho viento, pero en días sin viento y nublados no se genera suficiente volumen para satisfacer nuestras necesidades energéticas.

“El almacenamiento a gran escala de electricidad en baterías, por ejemplo, no es una opción viable”, sostiene Van Wijk. “Para ello, la cantidad que tienes que almacenar es demasiado grande. El hidrógeno también puede ser una solución a este problema. El hidrógeno se puede almacenar con bastante facilidad, por ejemplo, en cúpulas de sal subterráneas que fueron creadas en el pasado por la extracción de sal”.

Según el especialista, el almacenamiento y uso de hidrógeno es seguro: “El hidrógeno no tiene una buena imagen en lo que respecta a la seguridad, pero es una fama injustificada, porque es más seguro que el gas natural”.

Un cambio de modelo energético con muchas caras

Más allá del uso de energías específicas, “es necesario hacer mucho más, empezando por una mejora sustancial en el aislamiento del hogar, que reduce la necesidad de energía, además de usar más paneles solares en las casas y edificios”, recuerda Van Wijk. “También en la instalación de redes de calefacción se puede hacer mucho más: las tuberías de agua caliente residencial pueden calentarse con calor residual de la industria. Ahora la industria emite mucho calor al aire. Eso es un pecado mortal”.

Según el profesor, el papel de la ciencia y la innovación es muy importante, pero en el período hasta 2030 se trata principalmente de materializar cambios. Para alcanzar las metas de reducción de CO2 comprometidas para evitar un aumento elevado de las temperaturas, “es importante centrarse plenamente en la aplicación de las técnicas existentes, aunque la ciencia y la innovación no se detienen: aún se pueden obtener muchos beneficios de la mejora de la eficiencia en la generación de los paneles solares”.

En lo que respecta al hidrógeno, Van Wijk habla de "no solo pensar, sino hacer" y explica que "países como Japón y Alemania están apostando fuerte por esta energía, debido a que se puede transportar perfectamente a través de tuberías de transporte o en barco, por lo que no hay obstáculos para el surgimiento de un mercado internacional del hidrógeno”.

Artículo original en De Kleur van Geld, publicación de Triodos Bank en Holanda.

Imagen principal: Tren de hidrógeno, presentado en la feria innoTrans 2016 en Berlín (fotografía de Ubahnverleih).

Resto de imágenes: Pieter van den Boogert.