Para conocer bien cualquier tema es preciso ir a la raíz, a los orígenes. En alguna ocasión anterior he hablado sobre cómo surgió la banca ética, más allá de Triodos Bank, pero me parecía oportuno profundizar un poco más en este blog. Creo que es necesario, porque la historia de las finanzas éticas o con valores dice mucho sobre qué son realmente y también sobre su normalidad.

Durante mucho tiempo, la economía se consideró como una rama de la ética, como bien explica Jordi Alemany en Las finanzas éticas. De hecho, Adam Smith, del que disiento en muchos aspectos pero que suele ser considerado como fundador de la economía actual, era catedrático de Filosofía Moral en la Universidad de Glasgow.

Luego, como se ha visto, economía y ética no han ido siempre precisamente de la mano y ello ha dado lugar, afortunadamente, a una reacción humana.

El origen de las finanzas éticas modernas estuvo conectado con la erradicación de la esclavitud, lo que me parece no poco significativo. En los Estados Unidos del siglo XIX, algunas comunidades religiosas decidieron poner su dinero donde estaban sus valores, lo que se traducía en dejar de invertir en proyectos vinculados a la esclavitud y el alcohol.

Otro hito más reciente para el impulso de la banca ética llegó en el mismo país y en tiempos tan convulsos como los años 60. También estuvo vinculado, como no puede ser de otra forma, con una toma de conciencia y con la asunción de responsabilidades personales, inseparable tarea para conseguir ser más libres.

La oposición al aberrante régimen del apartheid en Sudáfrica y a la guerra del Vietnam motivó una reflexión de ONG, fundaciones, iglesias y ciudadanos que se dieron cuenta de que, sin saberlo, habían estado financiando injusticias que iban en contra de aquello por lo que se estaban manifestando en la calle. En ese contexto nació en 1971 el Pax World Fund, considerado como el primer fondo ético, que excluía a las empresas relacionadas con la industria del armamento o el apartheid.

¿Cómo surgió Triodos Bank?

Fue también en 1971 cuando se pusieron las bases del actual referente de la banca ética al otro lado del Atlántico, al crearse la Fundación Triodos. Pero su semilla estuvo en el encuentro en 1968 en Holanda de un grupo de estudio centrado en encontrar una forma alternativa, más consciente y más sostenible de gestionar el dinero. Lo formaban un economista, un profesor de derecho fiscal, un consultor de empresas y un banquero que querían ayudar a que el dinero tuviese un poder de cambio positivo en la sociedad, y no todo lo contrario.

El grupo consiguió un primer fruto de su discusión al crear la Fundación Triodos, que canalizaba donaciones hacia iniciativas innovadoras en los sectores social, cultural y medioambiental. El segundo y seguramente decisivo se produjo en 1980, con la constitución como banco de Triodos Bank, permitiendo incrementar la solidez e influencia positiva del proyecto y consiguiendo abrir sus puertas, sucesivamente, en Holanda, Bélgica, Reino Unido, España y Alemania.

Cuando crece la conciencia, crece la banca ética

Las raíces de la banca ética son profundas ya que, ¿por qué los ámbitos de la economía y de las finanzas deberían escapar a la ética, o a tener un sentido humano, como si fuesen un territorio de excepción, una especie de paraíso para la arbitrariedad y la injusticia? La banca ética es, en realidad, una idea simple y antigua, de sentido común.

Pero como hemos visto, la incorporación de la ética a las finanzas ha venido acompañada siempre de momentos clave en la historia, como la lucha contra la esclavitud o la guerra de Vietnam.

Parece que cuando crece la conciencia, crece la banca ética y es posible que volvamos a estar en otro de esos momentos duros pero que nos permiten ver algunas cosas con más claridad. En este sentido, el crecimiento de Triodos Bank sería un indicador de que algo está cambiando en nuestra sociedad, de que cada vez hay más personas que deciden tomar conciencia sobre el uso que hacen de su dinero no solo a la hora de comprar, sino también de ahorrar.

Es hora de quitarse el miedo y actuar, como afirma Arcadi Oliveres.  Precisamente es él quien hace el prólogo de Cómo cambiar el mundo con tu dinero, escrito por Xavi Teis (FETS), un libro breve pero muy recomendable para todos aquellos interesados en profundizar más sobre el por qué de la banca ética y las diversas aproximaciones que existen.

Pese al esfuerzo que comporta y a lo dura que puede ser a veces la realidad, es momento de estar informados, de ser conscientes, de tomar decisiones.