“En esta casa hacía más frío dentro que fuera”, recuerda Raquel Giménez. Tras una rehabilitación energética de la vivienda, “se nota que la pérdida de calor es mínima y, en comparación con otras casas de la zona, la temperatura está 2ºC por encima antes de encender la calefacción”.

¿Cómo ha conseguido esta mejora? ¿Y de qué manera, a la vez, consigue reducir el tipo de interés de su hipoteca?

Claves de una rehabilitación energética

Raquel Giménez ante su vivienda y unos sacos de pasta de celulosa, un elemento de aislamiento para el tejado, durante la obra

Giménez, agente medioambiental, adquirió en Andilla (Valencia) su casa actual que, en ese momento, tras casi 50 años, requería de una reforma para entrar a vivir.

Un buen aislamiento en las paredes que dan al exterior es el elemento básico en cualquier obra de rehabilitación energética.

En este caso, las soluciones elegidas para lograrlo fueron principalmente dos. Por un lado, la colocación en el interior de paneles de pladur y el relleno con corcho natural insuflado (a trozos) del espacio creado entre los paneles y la fachada exterior. Por otro lado, la sustitución de ventanas y cristales existentes.

La búsqueda de financiación

Giménez necesitaba financiación tanto para la compra como para la rehabilitación de la vivienda.

“Me resultó curioso que hubiese un banco con una visión ética, lo que había escuchado hacía tiempo por la radio. En el momento de la compra de la vivienda, recuperé la referencia y, después de ver en Internet la apuesta de la entidad por el medio ambiente y de preguntar en mi entorno, me decidí. Ver que, con la ecohipoteca de Triodos Bank, además premian de alguna forma la eficiencia energética, fue otro punto positivo“, explica.

Hipotecas Triodos

Más eficiencia, menor tipo de interés

Las Hipotecas Triodos se caracterizan por ser las primeras en el mercado que ofrecen un interés vinculado a la calificación energética de la vivienda. Además, si durante el pago de la hipoteca se acredita una mejora del nivel de eficiencia energética, para cuya rehabilitación también es posible solicitar financiación, se revisa a la baja el tipo de interés.

 

“Es un tema de conciencia, números y confort”

Así opina el ingeniero Esteban Morillo, que junto a su pareja, la economista Pilar Calvo, también han emprendido la rehabilitación energética de la casa de Sevilla en la que van a vivir. En su caso, con la obra en curso, su objetivo es mejorar la calificación energética de una D a una B.

“Cuando compramos la vivienda era habitable, pero valoramos el margen de mejora que vimos que tenía”, explica Morillo. La reforma incluye también revestimiento interior de las paredes que dan al exterior, el uso de ventanas que garanticen el aislamiento térmico y detalles como una puerta mallorquina, útil para permitir el paso del aire pero no de la luz en momentos como el verano.

Escala de la calificación energética de una vivienda, de la A, más eficiente y sostenible, a la G.

En su caso, llegaron a Triodos Bank por recomendación del arquitecto que dirige la reforma, además de porque consideraron que “la hipoteca es bastante atractiva”.

Para Morillo, “al final es un tema de conciencia medioambiental, pero también de que, cuando haces números, ves un ahorro a la larga y también que vas a vivir con más confort en el corto plazo”.

A la espera de la finalización de la obra, los residentes también valoran la experiencia positiva de algunos conocidos tras realizar actuaciones de rehabilitación energética.